La victoria de ayer significó mucho más que tres puntos. Sirvió para volver al triunfo, apagar algunos rumores mal intencionados, estar nuevamente cerca de la zona de clasificación y para darle un envión anímico al plantel para enfrentar lo que resta de esta etapa del Torneo Argentino A de Fútbol.

Ayer en el estadio José María Minella solo hubo un equipo con intenciones de jugar en la cancha y fue Alvarado, por momentos lo logró por otro no, pero la superioridad fue notoria en los 90 minutos de partido. En el primer tiempo, al igual que en el partido frente a Santamarina, le costó crear juego. Sólo se vio algún que otro desborde de Castillo y Ceballos, sin dejar de lado el gol increíble que se perdió Martínez, luego de que su cabezazo conectara en el travesaño y tras el rebote no pueda definir mano a mano con el arquero.
Ya en la segunda etapa Alvarado se soltó más, tomaron más protagonismo en la mitad de cancha Giménez y Anívole mientras que Ceballos y Castillo le dieron una profundidad interesante al equipo. Tanto que a los 15 minutos luego de un centro de Castillo; Martínez se tiró de palomita y gritó su primer gol para Alvarado. A partir de ahí todo fue control de los de Noto y Brown nunca le llevó peligro al arco de Evangelisti.

Sólo quedan 12 puntos en disputa de esta etapa y las chances de clasificar para Alvarado están intactas.