Por un Alvarado en crecimiento

En su tercer mandato al frente del Club Atlético Alvarado, Juan Zelaya junto a la comisión trabaja fuerte para mantener y proyectar la institución.

Desde su llegada, la entidad de Jara y Peña exhibió un gran crecimiento que abarcó distintas áreas como el equilibrio en los balances anuales, la revalorización de la sede y la villa deportiva, la educación, el progreso de disciplinas como el patín artístico y la fortaleza de un proyecto de fútbol que comienza desde las divisiones inferiores.

Quizás, muchas veces los magros resultados deportivos en los torneos de ascenso no dejen observar la realidad del club. La renovación de las estructuras, del establecimiento educativo, la creación y acondicionamiento de nuevos lugares para la reunión de la familia del barrio y la ciudad.

El presidente Juan Zelaya analizó los objetivos cumplidos en su gestión, proyectó sus nuevas metas para los próximos años y destacó el trabajo y la vitalidad de Facundo Moyano dentro de la institución.
-¿Cuál es la raíz en tu relación con Alvarado?
-Tengo mi abuelo que vivía en la calle La Pampa entre Avellaneda y Alvarado y mi padre que nació ahí, a la vuelta del club. Es ahí cuando uno no puede dejar de lado la historia.
 -¿Desde aquel tiempo a este cambiaron muchas cosas?
-Antes los chicos vivían en el club porque se hacía todo ahí. Se educaba, se jugaba, se perfeccionaban distintas cosas a partir del deporte. Muchos casamientos eran el club, era parte de la familia y la identidad de barrio. 
-¿Cómo se puede describir a Alvarado?
-Un club de barrio, de familia y de gente obrera donde no hay grandes empresarios. Somos todos comerciantes y gente de trabajo. Así perduró en el tiempo, con la misma mística de siempre. Y creo que el club de barrio trascendió las barreras y está dentro de los más grandes de Mar del Plata. Tanto institucionalmente como deportivamente. Hoy es uno de lo clubes de la provincia de Bueno Aires que más convocatoria tiene, uno ve a los chicos con la camiseta por todos lados y eso te impacta. 
-Y con el apoyo de toda la gente pudo generar semejante estructura…
-Claro. Por eso digo que es un de los clubes más ricos de la ciudad. Porque tiene un manzana con enormes posibilidades edilicias y tiene veintidós hectáreas donde puede crecer muchísimo deportivamente. Además, con las canchas de sintético permitió el aumento del patrimonio del club en casi un millón de pesos. Entonces creo que estamos pasando un buen momento y es la oportunidad par aprovecharlos.
-En el análisis, Alvarado no es solo fútbol…
-Yo creo que tiene que volver a tener más de treinta actividades que tenía dentro del club. Alvarado llegó a tener ajedrez, teatro, folklore y creo que a la larga lo puede lograr porque están los espacios físicos para hacerlo. Y si la gente se acerca al club lo vamos a lograr.
-¿Cuáles son las actividades actualmente?
-Tenemos una academia de taekwondo que funciona diez puntos; las escuelas de fútbol están a full y también las divisiones inferiores tienen una gran cantidad de chicos; el patín artístico está pasando por un muy buen momento; el voley ya está jugando con un equipo fantasía en la asociación y una vez que terminemos el gimnasio nuevo en el primer piso comenzaremos con el básquet. Por eso institucionalmente debemos apostar a generar más espacios para crear actividades para el socio.
-¿Cuál es el balance de las anteriores gestiones?
-En lo grupal creo que fue muy importante haber logrado la comisión que tenemos tras estos cuatro años de continuidad. Antes solamente quedaban cuatro o cinco personas trabajando. En cambio, para armar esta nueva comisión quedaron diez personas afuera que tienen ganas de trabajar y tiene intenciones de estar. En lo personal, todavía no estoy conforme porque uno quiere más y tratar de hacer día a día  más. Yo sigo identificado dentro de la línea de algunos presidentes como Abel Sterpone y Claudio Hernández quien afilió a Alvarado a la liga y creó la cancha. Aquellos que lograron realizar obras y el equilibrio entre el fútbol y lo institucional.
-¿Cuáles son los objetivos en su tercer mandato? 
-Uno es construir la pileta de natación y el otro es la cancha. Creo que esas dos cosas le puedan dar un cambio institucional muy grande. Primero que la pileta en la manzana sería fabulosa porque le otorgaría otro sentido a la entidad y lo cambiaria el ciento por ciento. Y la cancha es necesaria por la identidad propia el club, que la debe tener.
-¿De dónde se generarán los recursos?
-Lo que es el fútbol es fundamental contar con sponsors fuertes que te respondan y que te lleven a fortalecer la idea. La ayuda externa en los clubes hoy es necesaria desde el ámbito privado o público. Y es clave el socio y por eso hay que concientizar a la gente que se tiene que asociar. Siempre insistimos que si Alvarado tendría 2.000 socios fútbol no necesitaría tantos sponsors para mantener el fútbol. Hay que luchar por eso.
El rol fundamental de Facundo Moyano

“Creo que la inserción de Facundo Moyano en la comisión directiva fue fundamental porque es un muchacho que tiene una fuerza de juventud increíble y es la persona que Alvarado estuvo esperando por muchos años. Y ahora sale desde el club un diputado nacional. Él es del riñón propio del barrio. Primero fue la relación con Hugo Moyano que nos apoyó ni bien entramos en el club. En esta etapa, Facundo es muy importante para la institución y, al igual que con su padre, estamos realmente agradecidos por su labor en Alvarado y por el acompañamiento a través de Sutpa y Mutual de Camioneros”