Refuerzo de lujo

El «Chueco» García Lorenzo se suma a las inferiores

Foto: El «Chueco» con la camiseta del ascenso de 2008.

García Lorenzo: “Mi objetivo es formar jugadores y personas”

Ya estaba Gustavo Gatti, y Alvarado cerró la incorporación de otro de los jugadores que está muy metido en el corazón de los hinchas. Aguerrido, luchador, referente del equipo de Marcelo Philipp que logró el ascenso en la temporada 2007/08, sufrió el descenso en la siguiente y se quedó a poner el pecho en el Argentino B 2009/10. Después, vino como jugador y técnico de Racing de Olavarría y siempre se llevó grandes ovaciones. Seis años después, David García Lorenzo regresa para transmitir toda su experiencia en las inferiores y, a partir del martes, será el nuevo entrenador de las categorías 2000 y 2001. El “chueco” tiene muy en claro lo que quiere y los objetivos que se plantea en esta nueva etapa en el club.

-¿Qué sensaciones te genera volver al club después de seis años?
-Estoy muy contento, primero por el regreso después de seis años, peleándola en el fútbol, con buenas y malas, como me ha tocado vivir también en Alvarado, pero rescato principalmente lo bueno, el ascenso, después con un equipo diezmado enfrentamos a otros muy poderosos, nos acomodamos, llegamos con chances a la última fecha pero no pudimos mantenernos. Igual, el recuerdo es el mejor, al año siguiente tuve la oportunidad de quedarme y mantener la categoría con un equipo sin muchos nombres, jugando los partidos finales en Necochea. Viví muchas cosas acá en el club.

-Y ahora te toca volver en otra función, del otro lado de la línea de cal.
-Sí, es una experiencia que ya viví en Olavarría, que mientras jugaba en Racing dirigí la sexta división y la Primera Local durante casi dos años, y después cuando me retiré agarré el equipo mayor, que es algo muy importante en mi vida, porque pude seguir en el fútbol desde otro lado. Como jugador siempre me interesó la táctica, estudiar a los rivales y, una vez retirado, me dieron la oportunidad de ser técnico del Argentino A y las cosas me salieron bien y fue una experiencia muy linda. Y ahora me toca estar acá, en un club que creo conocer muy bien, al hincha también, y me alegra que apuestan por mí, creo que tengo condiciones y experiencia para brindar lo necesario en una categoría formativa, no sólo en lo deportivo, sino también en la formación de personas.

-En 2009, cuando Alvarado desciende del Argentino A, fueron pocos los jugadores que se quedaron, vos fuiste uno de esos y ahí es como que se terminó de acentuar el cariño de la gente, que les valoró mucho esa actitud.
-Esa vez creo que éramos tres o cuatro los jugadores que nos quedamos, teníamos la posibilidad de ir a otro equipo pero decidimos quedarnos en la ciudad, para tener una revancha por haber perdido la categoría después de todo lo que habíamos luchado y al ser un campeonato con muchas falencias, problemas económicos y demás, hace que la gente se termine mimetizando. Y además, las características de juego mías, también son las que coinciden con el hincha de Alvarado: no dar ninguna por perdida, poner el pecho en los momentos difíciles.

-¿Es una buena categoría la 2000/01 para trabajar?
– Son chicos de 14, 15 años, que me dan la posibilidad de encaminarlos en el deporte, más allá de que después sean jugadores o no, mi objetivo es que les quede algo del fútbol y de la vida. Yo creo que deben ser respetuosos con los rivales, con el cuerpo técnico, con sus pares y a partir de ahí está la base para empezar a trabajar. Yo creo que los mejores técnicos tendrían que estar en las inferiores, para poder brindarle a los de Primera jugadores ya hechos, técnica y tácticamente, como personas. Porque arriba se necesitan soluciones, sacar resultados y en inferiores lo que hay que sacar es jugadores, entonces hay que trabajar mucho en una falencia que tiene el fútbol menor que es que los jugadores juegan en una sola posición y tienen que acostumbrarse a dos o tres posiciones y a todos los esquemas, para estar listos cuando los necesiten. Es una edad linda para trabajar y pulir muchas cosas que ya han aprendido y sumar nuevas. Yo creo que con la repetición de trabajo, el objetivo va a ser encontrarlo hoy de una manera y a fin de año ver los avances. Eso va a ser un triunfo para mí, poder cambiarle algo, primero al individuo y después al grupo.

-¿Es indispensable que los chicos se acostumbren a entrenar los cuatro días para poder llevar adelante la idea?
-Sin dudas. No mi idea táctica porque yo creo que en inferiores hay que dar más técnica que táctica. Tendrán que entender todos que cuanto más veces toquen las pelotas, más van a aprender. Yo no puedo aceptar que un jugador toque la pelota 10 veces por entrenamiento, creo que no podés aprender nada así. Va a ser mi trabajo, preparar ejercicios en los que cada jugador tenga contacto 100 veces con la pelota en un entrenamiento. En Primera es otra cosa, ya lo deberían tener incorporado. Pero en inferiores, es indispensable trabajar en cada jugador lo que le falta y potenciar lo bueno. Habrá una estrategia en cada partido, pero lo importante no van a ser los resultados de cada domingo, sino poder ir mejorando los jugadores y que entiendan que se tienen que divertir jugando, sin presiones, con la responsabilidad que el juego te demanda, pero sin atarse, porque muchas veces por hacer lo que dice el técnico no me suelto y hago lo que me sale.

-Los entrenamientos van a ser muy dinámicos
-Sí, porque yo he sido muy obsesivo en mi carrera y siempre presté mucha atención a esas cosas, y no puedo entender que en un entrenamiento haya baches. Ni de Primera, ni de la 2007. Yo creo que el entrenamiento puede ser hasta de una hora, pero si no hay baches es bueno. Termino de hacer esto y hago lo otro, no puedo permitir que estén mis jugadores cinco minutos hablando y yo armando algo, tiene que estar todo listo, que eso es lo que le va a dar después la calidad a la práctica. Yo quiero lograr que el entrenamiento empiece a una hora y termine a una hora, todas cositas para que el jugador se sienta profesional, que sepa que de acá a dos años pueda jugar en la primera de Alvarado, que tenga los sueños que tuvimos todos. Recalcarle que tiene la oportunidad, pero que depende exclusivamente de ellos.

-Dirigiste Argentino A en Racing de Olavarría, te fue bien, pero no tuviste problemas en ser ayudante de campo en el Federal C con Martín Quintas en Círculo y ahora agarrás inferiores en Alvarado. Eso demuestra las ganas de trabajar y seguir aprendiendo cada vez más para cuando te toque volver a una categoría mayor.
-Tengo muy claras las cosas en mi cabeza. Sé que estoy preparado para hacer lo que me toque dentro de fútbol, puedo hablar cuatro horas de fútbol y no tengo que pensar qué decir y qué no, porque me estoy seguro de lo que estoy hablando, y cuando uno se siente seguro, creo que puede dirigir en cualquier categoría. Para mí es un lindo desafío, es volver a empezar, fuí a Círculo con Martín Quintas porque es un gran amigo de la infancia y fue una gran experiencia., ahora vengo a aportar mi granito de arena a Alvarado y muy seguro de lo que puedo ofrecer al club y mis jugadores.

-Conocés mucho Alvarado, pasaste muchos altibajos, no sólo en lo futbolístico, sino también en lo instituciones. ¿Cómo lo encontraste? ¿Qué te parece el proyecto que se está llevando adelante, con la obra de la Villa Deportiva quizá como máximo exponente?
-Es muy positivo que la gente que está a la cabeza de esto esté concientizada como lo está, haciendo un predio impresionante, he tenido mil comentarios de gente que le ha tocado ir a jugar contra Alvarado en inferiores y hablan de las obras que se están haciendo, ese cambio rotundo que ha hecho Alvarado. Sabemos que es un club grande que por todo el sacrificio que hacen, por la gente que tiene, que se desvive por ir a la cancha, por ir al club, se merece un predio de esas características, también me ilusiona que se esté formando algo lindo en las divisiones inferiores, con un proyecto serio a largo plazo, el Federal A vive un año más de transición y así y todo se está cerca de la clasificación, pero quizá se está invirtiendo más en lo institucional y se está esperando al año que viene o al otro, para tener una infraestructura para pegar el salto a una B Nacional. Son gente pensante y ojalá que salga todo como está pensado, que se pueda terminar esa villa tan linda, el equipo logre su objetivo rápidamente y Alvarado pueda llegar al fútbol grande porque Mar del Plata lo necesita.