Una muy buena actuación tuvieron los dirigidos por Mariano Padilla, no se apichonaron contra un candidato como General Urquiza, con jugadores de mucha experiencia, y le ganaron claramente 2 a 0, para sellar el pasaporte a los cuartos de final del Torneo Apertura que organiza la Liga Marplatense de Fútbol.

De entrada nomás, marcó el territorio Alvarado y fue el que tomó el protagonismo, más allá de que tenía la ventaja deportiva y con el empate lograba la clasificación. Pero con una columna vertebral que arrancó con la seguridad, siguió con la solidez de Joaquín Santos, pasó por la dinámica y el corazón de Gonzalo Fleming, para terminar con la categoría y cuota goleadora de Nicolás Mollo, se quedó con un trabajado y justo triunfo.

La «joya» del goleador Mollo para abrir el marcador en el amanecer del partido, encaminó la tarea. En una baldoza, se sacó de encima un defensor, desairó con un caño a otro y definió alto, lejos de las posibilidades de Aquindo. Si la cancha hubiera estado en mejores condiciones y los hombres de ataque más finos, Alvarado podría haber liquidado la historia en esa primera mitad, donde apenas sufrió con un tiro libre que Álvarez descolgó del ángulo izquierdo.

En el complemento, Urquiza quiso imponer su juego, pero no supo por donde entrarle y empezó a abusar de pelotazos frontales que engrandecieron la figura de los centrales albiazules. Ni con un hombre más (insólita expulsión de Mollo, que apenas tocó la pelota después que se le haya ido afuera y Farina lo echó), el «tricolor» pudo generar riesgo, más allá de ser el dueño de la pelota y jugar en campo de Alvarado, que mostró solidez en todas las líneas.

Para que la fiesta sea completa, ya con 10 hombres contra 9 de su rival (fueron expulsados Sassano y D’Addatto), en el cierre, con madurez y autoridad, generó contra ataques y en el último, la armaron entre Joaquín Benítez y Facundo De Llano, para que el «Chino» termine definiendo y desatando la alegría de un Alvarado que está entre los ocho mejores de Mar del Plata y va por más.

El equipo que dispuso Mariano Padilla fue: Hernán Álvarez, Joaquín Benítez, Damián Bonino, Joaquín Santos y Otto; Adrián Gil, Gonzalo Fleming, Ignacio Caamaño y Leonardo Verón; Ignacio Echeverría y Nicolás Mollo. Luego ingresaron Franco Montecchia, Facundo de Llano y Aaron Macsad.