Dos semifinales en el año
Alvarado se despidió de la temporada con la frente en alto
27 de noviembre de 2016
Un balance ampliamente positivo hace Mariano Padilla y la comisión directiva que encabeza Pablo Mirón del año que finalizó para la Primera División que afrontó de gran manera los dos certámenes de la Liga Marplatense de Fútbol. Queda el sinsabor de haberse quedado nuevamente en semifinal, de saber que se estuvo cerca y que se pudo ganar en los 90′. Pero al igual que en el Apertura, la cancha de San Lorenzo, aunque en el otro arco, no estuvo del lado de Alvarado que cayó ante River por 5 a 3 desde los doce pasos, tras igualar 1 a 1 en el tiempo regular. Muchos jugadores que mostraron un gran nivel, un conjunto que se solidificó desde lo colectivo, la llegada de varios de ellos al banco del Federal A y el surgimiento de chicos que vienen de las inferiores, hacen que el análisis vaya por encima del resultado y sea muy bueno.
En la semifinal del Torneo «Charlie Soria», el encuentro ante River estuvo signado por la paridad, de dos planteles con mayoría de jóvenes que le pusieron mucha dinámica y en la que lo físico no fue diferencia, ni para uno ni otro lado. En la etapa inicial, el «tripero» tuvo un poco más la pelota pero casi no inquietó a Hernán Álvarez, salvo un mano a mano de Alves que el «1» tapó de gran forma, achicando casi en la puerta del área. Del otro lado, Agustín Millán pudo abrir el marcador con una pelota que le quedó demasiado abierta, definió por abajo de Budroni y sacaron sobre la línea.
En la segunda mitad, el equipo de Ramajo golpeó temprano, a la salida de un córner con un cabezazo de Amodío que puso el 1 a 0. Más allá del impacto, Alvarado siguió intentando, apostando al juego por abajo y la búsqueda por los laterales. Sin embargo, tuvo que esperar hasta promediando la etapa, cuando el recién ingresado Alan Aguilera, en la primera pelota que tocó, «guapeó» con el central albirrojo, se la llevó con la cabeza y fusiló al arquero «millonario» para dejar las cosas como al principio. A partir de ahí, los de Padilla le hicieron sentir su mayor experiencia y lo fueron llevando, generando ocasiones para quedarse con la victoria, sobre todo con la movilidad y potencia del goleador de la quinta, que fue determinante con su ingreso. De todas formas, el marcador no se movió y la definición se fue a los penales.
Desde los doce pasos, Alvarado comenzó con el pie izquierdo, porque Joaquín Benítez remató cruzado, Budroni le adivinó la intención y marcó la primera diferencia. Que terminó siendo la única, porque ningún jugador de River falló en su remate (todos muy bien pateados, aún con Álvarez acertando el lado), Caamaño, Castro y Verón hicieron lo propio, pero Castagnino fue al último con autoridad y cerró la serie 5 a 3.
Alvarado formó con: Hernán Álvarez; Franco Montecchia, Joaquín Benítez, Joaquín Santos y Mauro Castro; Adrián Gil, Gonzalo Fleming, Ignacio Caamaño y Leonardo Verón; Ignacio Echeverría (Alan Aguilera) y Agustín Millán (Andrés Otto).
Dos torneos en el año y en ambos haber llegado a la semifinal, es más que meritorio. Con buenos rendimientos, con jugadores que se siguen fogueando y son observados por Duilio Botella para ser utilizados en el Federal A, con chicos que surgen de las inferiores y están a la altura, para darle forma al proyecto que encabeza Mirón desde la presidencia y Gustavo Gatti desde la coordinación. #VamosAlva