Las figuras sobre ruedas

A partir del trabajo de la profesora Natalia Ferrari dentro de la institución,
el patín artístico genera un movimiento de decenas de chicas en la sede de Jara y Peña. Entre ellas, la fantástica patinadora Nadia Ortíz Villar.

El patín artístico es una de las actividades que también permite el reconocimiento del Club Atlético Alvarado a nivel local y nacional. Desde el arribo de la profesora Natalia Ferrari, en la institución de Jara y Peña desfilan decenas de niñas y jóvenes que quieren aprender y perfeccionarse en esta disciplina.
La gran cantidad de logros conseguidos respaldan la labor de Ferrari al frente de la escuelita y el grupo de competencia que entrena.
“En el club hace casi 10 años que estoy enseñando patín. Tengo un grupo de escuelita y otro de competencia y la preparación es para los torneos locales, provinciales, nacionales y sudamericanos. Ahora estoy entrenando a una de las nenas de Alvarado con vistas al torneo sudamericano que se realizará en Colombia en el mes de agosto”, manifestó la profesora.
Sobre la cantidad de chicas que tiene a su cargo, señaló: “En este momento tengo un padrón de alrededor de 50 alumnas que aprenden en las instalaciones del club y eso gracias a la flexibilidad de horario y las comodidades que me ofrece el presidente Juan Zelaya y la comisión directiva Ahora con las remodelaciones se complicaron un poco los entrenamientos y no quedaron tantas nenas. Pero cuando volvamos al club con todo renovado retornaremos al ritmo normal”.
Como en otros deportes, el patín no está ajeno a los innumerables esfuerzos que se realizan para costear los gastos de los viajes a los certámenes. Al respecto, Ferrari explicó: “Realizamos cenas, rifas o acciones a beneficio y tratamos de estar juntas en todos lados. En el caso de Nadia Ortiz, el Ente Municipal de Deportes y Recreación le otorgó una beca que el año pasado no le habían dado. Tras explicarles a las autoridades el progreso de Nadia y su proyección a nivel internacional, más allá de la edad, conseguimos esa posibilidad”.
Justamente, Nadia Ortíz Villar es la joya del patín artístico. Medallas a escala nacional y sudamericana a tan temprana edad advirtieron el progreso en su rendimiento y aventuran un futuro prominente. 

Nadia, contó cómo se acercó al patín: “Todo empezó cuando un día fui a ver a mis primas a un torneo, pregunté y empecé a patinar con ‘Nati’ (Ferrari). Como el club quedaba cerca de casa, me anoté y comencé ahí”.

Más allá de la competencia, para esta joven patinadora, que tiene una gran carrera por delante, la amistad en el deporte es vital: “Lo más importante es hacerme amigas porque después dentro de la pista cada una por su parte. Pero afuera no hay ningún problema, somos todas compañeras”.
Por otro lado, Nadia expresó quienes son su sostén en este camino: “La familia y un montón de gente que siempre me ayuda cuando lo necesito. Mi mamá Norma Villar está en todos lados, me lleva y me trae, y nunca me falla”. Además, no se olvidó de su profesora: “A ‘nati’ hace siete años que la conozco, es genial. Es una persona transparente, buenísima y la quiero muchísimo”.
A raíz del trabajo de base de Natalia Ferrari junto a su grupo de alumnas, Alvarado tiene un real significado dentro del patín artístico en la ciudad. Con objetivos cumplidos y otros por alcanzar. Teniendo en cuenta los lauros logrados en etapas anteriores y las nacientes promesas que renuevan las ilusiones día a día.