El Gimnasio Alvarado se está acostumbrado a traer buenos exponentes de los deportes de contacto a entrenar en el club y que los chicos que entrenan allí, puedan ver atletas de primer nivel. En este caso, fue el turno de Christian «el ninja» Guido, campeón argentino de kick boxing, que se puso bajo las órdenes del «Turco» Roura para realizar sus trabajos mientras estuvo en Mar del Plata y disputó doce rounds en continuado con peleadores de otros gimnasios que tuvieron una medida de alto nivel.

El hombre de Tigre mostró una gran predisposición, agradeció la hospitalidad del club y, en especial del «Turco» Roura, y destacó el gran trabajo que se realiza, la forma en que se entrena y los buenos exponentes que hay en la ciudad. Y quien lo dice, es palabra autorizada, porque tiene 65 peleas, fue campeón argentino en WKF y va por un nuevo combate el próximo sábado en una velada que se llevará a cabo en el club San Martín de Junín, frente a Ezequiel «El Guerrero» Urquiza.

Agotado por los doce rounds en continuado (de 3×1 con seis rivales diferentes), Guido contó cómo llegó a Alvarado: «Por intermedio de un amigo me contacté con el «Turco» y vine a entrenar acá. La verdad, que me llevo una muy buena imagen, se trabaja en un muy buen nivel, un entrenamiento muy profesional. He tenido la oportunidad de estar en muchos lugares del mundo, Thailandia, Perú, Chile, Colombia, Ecuadro y otros países más, y no hay nada que envidiarle».

Su estadía de tres días en la ciudad, previo a la pelea en Junín, lo tuvo también recorriendo otros gimnasios, todo gracias a las gestiones de Roura, coordinador de los deportes de contacto de Alvarado. «Estoy muy agradecido, porque sino sólo hubiera venido a correr y hacer sombra. De esta manera, pude hacer un entrenamiento fuerte y llegar de la mejor manera a mi pelea número 66 en kick boxing».

Respecto al crecimiento de esta disciplina en el país, el «Ninja» remarcó que «es cierto que cada vez se le da más difusión y son más los chicos que lo practican, pero se debería tener más sponsors, más apoyos económicos para los chicos que vienen apareciendo. Uno lo hace por amor, pero es difícil competir con los mejores sin una buena estructura, porque uno tiene que dejar muchas cosas para entrenar a un alto nivel». Cabe destacar, que Guido colabora en su ciudad, Tigre, con chicos de barrios carenciados en la inclusión en el deporte y el aprendizaje de esta disciplina.

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